Día 4: Yangón, descubriendo la gran selva de ciudad
Yangón es una selva de ciudad.
Con sus 7 millones de habitantes, la convierte en la ciudad más poblada de Myanmar. Fue capital de Myanmar entre 1852 y 2006, cuando la Junta militar decidió trasladar desde entonces la capital a la nueva ciudad recién construida: Naypyidaw.
Los orígenes de Yangón se remontan al templo Schwedagon Paya. Aunque debatible, popularmente se dice que este templo fue construido hace 2.500 años. Debido a la afluencia de peregrinos que recibía un pequeño poblado se fue conformando a su alrededor. Lo que se sabe históricamente es que la ciudad fue fundada como Dagón a mitad del siglo XI por la dinastía Mon. Dagón fue creciendo en importancia y llegó a albergar reyes, como la reina Shin Saw Pu, que sería la única reina en toda la historia de Myanmar.
En 1755 el rey Alaungpaya, fundador de la dinastía Konbaung, conquistaría Bangón cambiándole el nombre por Yangón, que significa “el fin de la guerra”. A los pocos años, los ingleses conquistarían la ciudad y todo el sur de Birmania durante la segunda guerra anglo-birmana (1852). Sería en este año que los británicos convertirían a esta ciudad en la capital del país.
Yangón fue un puerto comercial bastante importante durante la época de la colonia, por lo que hoy en día esta ciudad es la que alberga más edificios coloniales de todo el sudeste asiático.
La Oficina de Ministerios fue construido en 1889 y fue la sede del gobierno inglés en Birmania. Aquí fue donde el general Aung San y 6 de sus compañeros fueron fusilados por los ingleses en 1947 cuando luchaban por la independencia de su país (ésta llegaría tan solo 6 meses después). Desde el 2005, a causa del cambio de capital, el edificio ha quedado en desuso y abandono. Actualmente está prohibido el paso aunque está planeada su rehabilitación.
Entre la selva de metal, surge la estupa dorada del Sule Paya (2.000 MMK - 2 €).
Su emplazamiento un poco caótico (Sule Paya se encuentra en una rotonda con mucho tráfico rodado) no es casualidad. La palabra “sule” proviene del birmano “su-way”, que significa “encuentro”. Es decir, es el lugar donde los antiguos caminos se cruzaban. Según se dice Sule Paya es incluso más antigua que Schwedagon Paya. Cuando llegan los británicos, consideran Sule Paya como el centro de Yangón, y de aquí partiría el trazado de las calles que existen en la actualidad.
Sule Paya, aunque pequeño, ha sido el epicentro de grandes momentos de la política birmana. Aquí se han organizado y manifestado ciudadanos durante los levantamientos de 1988, la revolución de azafrán del 2007, y más recientemente la revolución de primavera en 2021.
Según cuenta la leyenda la estupa principal, llamada Kyaik Athok, alberga un cabello de Buda.
Como siguiente parada fui a Botataung Paya (3.000 MMK + 1 MMK para cámara - 4 €), otro templo budista que éste se encuentra en la rivera del río Yangón. Abundan las diferentes historias y leyendas sobre el origen de este templo. Una de estas leyendas es que un par de hermanos, Tapussa y Bhallika, venían viajando desde la India con unas reliquias del Buda, esto hace unos 2.500 años. Cuando el rey Okkalapa, que gobernaba en esta orilla del río se enteró de tal acontecimiento, mandó a construir Schwedagon Paya con el fin de guardar ahí las reliquias del Buda.
Mientras se construía aquél templo budista, los hermanos se quedaron habitando en la orilla del río y se decidió que mientras tanto las reliquias, que consistían en 8 pelos del Buda, permanecerían con ellos. Una vez concluidas las obras de Schwedagon Paya, 7 pelos fueron para allá, y el octavo pelo el rey Okkalapa se los dejó a los hermanos en agradecimiento. Los hermanos decidieron entonces construir un templo budista donde ellos habían estado residiendo y cuidando las reliquias del Buda. Y es así como comenzaron las construcciones de Botataung Paya.
El nombre del templo significa en birmano “1.000 líderes militares”, ya que según cuenta la leyenda 1.000 de estos hombres vinieron a custodiar las reliquias cuando éstas llegaron traídas por los hermanos.
La historia de los hermanos y la reliquia cogió fuerza curiosamente en 1943. En ese año la estupa que vemos en la foto de arriba fue bombardeada por las fuerzas aliadas durante la Segunda Guerra Mundial. 5 años después comenzarían las labores de reconstrucción y ahí, una cierta aura de misterio comenzó, ya que se descubrió que el centro de la estupa tenía en efecto una cámara de reliquias. Adentro, unos sorprendidos trabajadores encontraron una especie de ataúd de piedra que adentro contenía unas 700 piezas de joyería y oro. Entre estas antiguas piedras, había otra pequeña figura de estupa hecha en oro, con un pequeño cilindro en su interior. Al abrir el cilindro, se constató que contenía 2 reliquias del Buda del tamaño de una semilla de mostaza, y un pelo.
La reconstrucción de la estupa le trajo un punto original en comparación con las otras del pais. Éstas, por lo general son sólidas por dentro, por lo que no se puede entrar. Sin embargo, en 1948 Botataung se reconstruyó hueca por dentro y con acceso al público. Por dentro es un zig-zag curioso mientras uno va girando por alrededor del interior de la estupa. Cada cámara tiene vitrinas de cristal con algunos objetos antiguos. Definitivamente, el mayor tesoro (además del aire acondicionado) es el cabello de Buda que todavía se conserva y que se encuentra dentro de una vitrina.
Afuera de la estupa, en un costado, se encuentra el pavellón Nat. Los Nats son espíritus a los cuales los birmanos rezan. En Birmania se ha mezclado esta creencia en los Nats con el budismo. Los Nats por lo general eran personas en algún momento y que tuvieron muertes violentas. Hoy en día hay Nats para todo: para los árboles, el agua, las montañas, etc... incluso cada pueblo puede llegar a tener su propio Nat para que los cuide de cualquier adversidad. Salvando las distancias, podría decirse que son una especie de santos según como lo entiende la religión católica, a los cuales se les puede rezar para pedirles algo.
Botataung Paya no es la excepción y tiene su propio Nat que le cuida, se llama Bo Bo Gyi, y está representado por una estatua casi de tamaño natural.
Como hemos dicho, Botataung Paya se encuentra en la orilla del río Yangón, así que decidí dar un paseo por el puerto que es a donde se dirigen las familias birmanas al caer el sol.
Una vez habiéndose metido el sol, ahora sí me dirigí de vuelta a mi hotel, que era el Hotel Bond (30.000 MKK - 14 € la noche con baño privado y desayuno incluido). Un excelente hotel en una muy buena ubicación.